Las cualidades que Reni Rizzo brindó, como optimismo, amor, respeto, e interés genuino, desde el fondo de su corazón, en los doce años que trabajó con la Asociación de Alzheimer son reflejadas en esta conmovedora e inspiradora historia. Trabajó para ayudar a familias afectadas y a individuos a quien habían diagnosticado recientemente. Sus esfuerzos incansables y altruistas afectaron la vida de miles de personas, y siempre actuó con compresión y paciencia. Era una luz para las personas que tenían una vida de obscuridad; una inspiración para todos, e infinitamente dedicada a su causa. Ahora ha sido inspirada a comunicar información e importantes aspectos de la enfermedad de manera que sea fácil de entender para la gente joven. Que Dios te bendiga, Reni, por este regalo. Brenda M. Johnson, M.Ed. Directora Ejecutiva Asociacion del Alzheimer Grande Miami, 1998-2002